viernes, 15 de enero de 2010

Va de planetas la cosa: Aquasilva

Hoy he podido comprobar que las grandes mentes piensan igual cuando, dispuesto a escribir la entrada que llevaba aparcada en mi cerebro toda la semana, he descubierto que ya la escribió otro alumno de esta asignatura el curso pasado. No obstante, he decidido que puedo afrontar el problema desde otro punto de vista, así que a ello voy.


Mi idea original era analizar la atracción gravitatoria que sufren los personajes de la trilogía de Aquasilva (escrita por Andselm Audley) cuando se encuentran sobre el planeta en el que se desarrolla la acción, el propio Aquasilva. Cuando hace 5 años abrí el primer libro y vi el mapa del planeta en cuestión, me chocó que dijesen que era un planeta mucho más grande que la Tierra, aunque en ese momento mi duda era como se desplazaban en tiempos razonables por semejante superficie. A día de hoy, me llama mucho más la atención la atracción gravitatoria de un planeta aparentemente parecido a la Tierra, pero con un radio de unos 16000 km. Sin embargo, dado ya se ha analizado la aceleración gravitatoria en cuestión aquí, he decidido ponerme de parte del autor y ver de qué tendría que estar hecho el planeta para que los habitantes del mismo (humanos, por supuesto) no pareciesen discos de jockey, es decir, para que la aceleración gravitatoria de la superficie sea 10 m/s2.


Lo primero que deberíamos saber es como es ese planeta. En la trilogía es descrito como un planeta cuya superficie está casi completamente cubierta de agua. Además, en las últimas páginas del segundo libro (Inquisición) se dice que la profundidad de ese enorme océano es de aproximadamente 18,5 km, con lo que ya tenemos un dato acerca de parte de la masa del planeta (como hay 5 continentes de tamaño diminuto en comparación con el océano, tomaré como aproximación que todo es océano). Sin más dilación, veamos la contribución del agua a la masa total:


magua = dagua·Vagua = 5,8·1019 Kg


Una vez que sabemos la masa del agua que hay en ese planeta, procedo a calcular la masa total necesaria para conseguir el valor de g terrestre en un planeta de esas dimensiones:


Maquasilva = g·Raquasilva2/G = 3,8·1025 Kg


Ahora, teniendo forma de calcular la masa de la parte del planeta que no es el agua de la superficie, paso a calcular la densidad de esa parte del planeta:


daquasilva = Maquasilva/Vaquasilva = 2222.5 Kg/m3


Si observamos la tabla de densidades que aparece aquí, veremos que la densidad obtenida se parece mucho a la del carbono, con lo que creo que no sería descabellado afirmar que ese es el material base del planeta. Sin duda, sus habitantes no tendrán demasiados problemas a la hora de encender fuegos.

1 comentario:

Chomp Oncio dijo...

De hecho, no los tienen. LA dictadura que gobierna el planeta domina el fuego xD